Meditación del testigo silencioso

Meditación del Testigo Silencioso Relájate, siéntate o recuéstate en un lugar sereno. No trates de controlar el proceso del pensamiento tratando de pensar en ciertas cosas y en otras no. En lugar, deja que tu mente piense en lo que quiera. Ahora observa tu mente y toma conciencia de como no estás formando parte del proceso de pensar. Di lo siguiente, “Soy el testigo silencioso, no hago ningún esfuerzo en pensar, los pensamientos llegan solos. Estoy viendo como los pensamientos cruzan mi mente pero yo soy ajeno a ellos. Soy el testigo silencioso de las actividades de mi mente.” De esta manera, podrás experimentar que no eres la mente.

También podrás observar las emociones, sentimientos, deseos, miedos, y demás que van surgiendo a la superficie de la mente y después desaparen. La corriente de la actividad mental fluye, y tu la observas. Así como una persona se sienta junto a un rió siempre en movimiento, así tu, el ser, estás sentado junto al rió de la mente. De igual forma como un rió puede estar cristalino o contaminado, así el rió de la mente puede estar muy limpio o muy sucio. En cualquier caso tu eres el testigo del rió y no el rió mismo.

Tal vez no estés muy contento observando a esta corriente de la mente fluir libremente, y entonces trates de controlarla, de reencauzarla o de pararla por completo. Pero el hecho mismo de que trates de controlar o reorientar tu mente, combinado con el hecho de lo difícil que es tener éxito en esto, muestra con más evidencia que el ser no es la mente ni la corriente que pasa por en la mente.
Jagad Guru Chris Butler

 

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